Caminata de las Floreras
MINERAL DEL CHICO, Hgo.- En un recorrido de aproximadamente 13 kilómetros, con la participación de mujeres de la tercera edad que, en su época de infancia y acompañadas de sus madres, iniciaron esta travesía para vender flores en la capital del estado de Hidalgo.
Acompañadas de familiares y amistades, recorrieron sinuosas veredas y caminos reales localizados en zonas boscosas, desde Mineral del Chico hasta Pachuca, con el propósito de recordar esta ruta que, hace más de siete décadas, les permitió a sus madres obtener ingresos económicos para el sostén familiar a través de la venta de flores.
Algunas mujeres como Benita Giménez rememoraron que cuando recayó la actividad minera en Mineral del Chico, “el número de habitantes vino a menos y prácticamente desaparecieron las fuentes de trabajo que dejaron a decenas de familias en una situación precaria”.
En tal recuerdo coincidieron las septuagenarias Casilda Cabrera e Inés Cabrera Olguín, quienes señalaron que para hacer frente a esta difícil situación, “nuestras madres decidieron trasladarse a la ciudad de Pachuca a vender flores que abundan en este municipio, como alcatraces y agapandos.
“La salida del pueblo iniciaba a las cuatro de la mañana para llegar temprano a la capital hidalguense, en un recorrido de más de cinco horas cargando los hatos de flores en chiquihuites, soportados en su base por un ayate que, a su vez, se sostenía con un mecapal apoyado en la frente. Algunas mujeres hacían el recorrido descalzas”, manifestaron.
Con la memoria aún fresca de esta actividad comercial que realizaban sus madres, a quienes acompañaron desde niñas, agregaron que una vez comercializadas las flores en Pachuca, “el recurso que se obtenía era empleado para adquirir el mandado, productos básicos que permitían que nuestras familias comieran durante varios días”, dijeron.
Actualmente y a manera de recordar esta odisea que sufrieron junto con sus progenitoras, cada año efectúan lo que denominan la tradicional caminata Ruta de las Floreras, y en el trayecto del camino real o de herradura, “vamos colocando pequeñas tablas de madera, adornadas con flores y con el nombre de algunas mujeres que incluso ya fallecieron.
“Es un rosario con los nombres de quienes iniciaron esta caminata, pues se van colocando en árboles de pino, como un homenaje a la recia actividad cotidiana que realizaron para llevar el pan y la sal a sus hogares, con la venta de flores”, recalcaron.
De las más de 30 mujeres floreras de Mineral del Chico, como Bernarda Pérez, Bernardina Lugo, Luisa Bello de Olmos y Lugarda Giménez, entre otras, aún sobreviven Casilda Cabrera, Benita Giménez, Nieves Álvarez, Inés Cabrera Olguín y Juana Mendoza.
Fuente: El Sol de Hidalgo
https://www.elsoldehidalgo.com.mx/local/caminata-de-las-floreras